Mientras los días del jueves 25 al domingo 28 de julio menguaba la hermosa luna de Alozaina, días y noches de Feria disfrutaban la gente del pueblo y de otros aledaños. Personas de diferentes edades y grupos sociales que animados por el ambiente, contribuyeron de manera solidaria al Proyecto de la Casa de Pepe Bravo.
Este año, con la magnífica caseta de feria montada en la Plaza superior junto a la Iglesia, el gran número de personas que se acercaron, unida al ambiente creado por las orquestas y el creado entre los voluntari@s, han sido días fantásticos los que se han vivido para el pueblo y para la Casa.
Esto es fruto del esfuerzo de tantos y tantos días antes del evento, pues se tuvieron que preparar decenas de kilos de carne para shawarma, pinchitos, montaditos... verduras, cientos de litros de refrescos, cervezas, vinos, tintos de verano, licores para combinados... cajas y cajas con centenares de material de menaje como platos, vasos, cubiertos, servilletas... y miles de detalles que contempla tan enorme actividad.
Destacar el éxito en la preparación y atención a nuestros especiales 500 comensales del domingo; personas de avanzada edad que pudieron disfrutar de un menú que se les ofreció con mucho cariño.
Los días han transcurrido con mucho ánimo por parte de los organizadores y voluntari@s, ánimo que se ha traducido en un gran equipo entusiasta que ha contaminado a las personas que se han ido acercando día y noche por la caseta.
Debemos agradecer al Excmo. Ayto. de Alozaina por la confianza prestada hacia nosotros, a otras entidades y personas que han realizado donaciones, y como no, a las personas que han contribuido a que el Proyecto de la Casa de Pepe Bravo siga adelante por su participación directa o indirecta, en estas fiestas para nosotros solidarias.
La Casa cada vez se palpa más llena, no sólo por la consecución de instalaciones, sino por la alegría que cada vez más, riega a las personas que allí conviven y que agradecen el apoyo que se les brinda.
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